“¿Quién se ha llevado mi queso?”







 
En un laberinto vivían dos ratones (Oli y Corri), y dos personitas (Kif y Kof). Sus vidas consistían en buscar
diariamente queso para alimentarse. Cada mañana madrugaban, y se preparaban para recorrer el laberinto en busca de su Alimento.
Mientras que ratones hacían grandes recorridos para encontrar el queso, ya que éstos no pensaban y se guiaban por el olfato y el instinto,  Las personitas si 
imagesUn día los ratones y las personitas encontraron una gran cantidad de queso (llamada “Central Quesera Q”).pensaban  dónde podían encontrarlo, por lo cual no recorrían tantos pasillos para conseguir el queso.
 
Las personitas pensaron que tenían queso para toda la vida, y ya no madrugaban, ni hacían el mayor esfuerzo para buscar su alimento, simplemente iban cuando querían, comían el queso y  se regresaban a su lugar;  sin embargo los ratones hacían todo exactamente igual que antes, madrugaban, para ie a la “Central Quesera Q” ,  comían el queso, pero adicionalmente tomaban de más en caso de que se acabara.
Un día, las personitas fueron a la “Central Quesera Q”, y se dieron cuenta de que el queso se había terminado, asomradas,  no podían creer lo que les estaba sucediendo. Sin embargo los ratones al ver que ya no había queso en la “Central Quesera Q”, siguieron su camino por el laberinto en busca de más queso.
Las personitas en cambio, estaban desentrenadas, ya no madrugaban, se habían acostumbrado a tener una vida cómoda, sin embargo sus amigos ratones estaban preparados como antes.
Las personitas estuvieron mucho tiempo sin comer, lamentándose de por qué había desaparecido el queso, y sin hacer nada para solucionarlo, simplemente utilizaban su mente para sacar conclusiones de lo sucedido, sin querer creer que se había podido gastar de tanto consumirlo.
Hasta que un día, hambrientos, Kof, que empezaba a comprender que debía seguir buscando queso, siguió su búsqueda por el laberinto, dejando a su compañero Kif en la “Central Quesera Q” que se negaba a empezar otra vez la búsqueda de queso por el laberinto.
Kof tuvo muchos problemas para encontrar el queso, sufrió en su búsqueda, encontraba pequeños trozos ya raídos por sus amigos ratones que le llevaban ventaja ya que habían salido antes a buscar, y no le gustaban, por eso siguió en su búsqueda, ya que estaba acostumbrado a comer un queso mejor. Por el camino iba dejando señales a su amigo Kif para que le fuera más fácil encontrar el queso, una vez que se decidiera a salir a emprender la búsqueda de nuevo del queso.
Kof logró encontrar una nueva “Central Quesera N”, repleta de queso, y allí se reencontró con sus amigos ratones que ya habían encontrado hace un tiempo esa central quesera, en la cuál ya comían.
Kof se alegró mucho de encontrar el nuevo queso y a sus amigos ratones, aunque su camino hubiera sido duro, había conseguido encontrar de nuevo el queso que tanto le gustaba, pero entonces se acordó de su amigo Kif, del cual todavía no sabía si había emprendido la nueva búsqueda.
Los puntos destacados de este cuento son:
*La vida es un constante cambio
*Si nos anticipamos al cambio nos evitamos sorpresas, muchas veces desagradables.
*Si nos anticipamos al cambio podemos controlarlo
* Adaptarnos al cambio con rápidez nos permite avanzar
*Los cambios externos, obligan a cambios internos.
*Disfrutar el cambio nos llena de gozo, Mirar atrás nos causa infelicidad
*Debido a que la vida es un proceso de cambio constante, debemos estar preparados a seguir nuestros procesos de cambio
Las innumerables situaciones a las que diariamente estamos expuestos, nos obligan e estar preparados para los cambios ya  sean voluntarios o involuntarios. Es entonces, cuando  ponemos en práctica los valores, principios y experiencias  aprendidas a lo largo de nuestra existencia que nos conllevan a avanzar ó a estar comodamente estancados en el conformismo.

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